Snap-Apple Night
pintado por el artista irlandés Daniel Maclise en
1833. Se inspira en una fiesta de Halloween que asistió en Blarney, Irlanda, en 1832. |
Jalohuin - Jalovin
– Halloween “American Cahuin” Por
Pedro Sergio Antonio Donoso Brant ocds Cahuín, es una palabra de origen Mapuche, noble
pueblo originario de Sud-América, Chile y Argentina, su significado es una
fiesta que se “sale de madre”, voz coloquial que expresa cuando algo se
excede o se pasa de lo acostumbrado o lo normal. En Chile se utiliza esta expresión “Cahuín”,
entre otras cosas, para señalar algo medio turbio, enredado, incierto. A los
chismosos se les dice “Cahuineros”. Hace más o menos 10 años, en Chile, no se
conocía esta fiesta, hoy, los niños la esperan con ansiedad y sin conocer su
significado, entonces dice “Jalohuín”, o “Jalovin”, y los padres ingenuos les compran a sus chicos
una sarta de cosas relacionadas con esa nueva tradición impuesta por
creadores de verdaderos negocios de la fiestilla del terror. Halloween, o víspera de la Fiesta de Todos los
Santos, es una transformación de la antigua costumbre anglosajona y carece de
todo sentido religioso. En efecto le da un sentido terror, brujas y
fantasmas, al más puro estilo pagano a esa fecha tan sentida para muchos
creyentes. La celebración del Halloween que comenzaron los
primeros celtas paganos, se mezclo posteriormente al cristianizarse estos con
la fiesta cristiana de Todos los Santos, permaneciendo como un verdadero
“Cahuín” de enredos y turbios, que por una parte recordaba los buenos
ejemplos de los santos y los mezclaba con historias de supersticiones, terror
y miedos y en vez de orar, hacían burlas de los difuntos. Inmigrantes irlandeses introdujeron Halloween
en los Estados Unidos, entonces en principio era parte de la costumbre
popular e ignorante, luego la americanización, le agrego para hacerla mas
festiva y humorística, inventos y creencias sobre brujas, duendes, fantasmas,
monstruos de diversos tipos, incluso, se incorporo temas draculianos.
Y como muchas cosas que son un buen negocio, se
propagan por el mundo buscando gente incauta. Todo un “American Cahuín”. Pero la sensatez, prudencia, el buen juicio y
la reflexión antes de actuar debe imponerse, por esa razón, por tanto les
invito a que pensemos si los cristianos debemos considerar este tipo de
fiestas. El punto complicado para los
padres, tíos y abuelos, es que hacemos cuando nuestros hijos, sobrinos o
nietos, inocentes de todo paganismo, ya han sido entusiasmados por sus
amiguitos o maestros de escuela a participar de este festejo, ¿Cómo le
explicamos que no nos gusta?, o dejamos pasar esta situación como muchos lo
hacen con las creencias de Santa Claus?, aquí les dejo un link, donde es
posible orientarse bien al respecto; http://mercaba.org/FICHAS/VARIOS/halloween_cristianismo.htm Ojala, esta fiesta, la cual ya no nos podemos
sacar de encima, no nos pervierta y no nos aparte del camino que nos ha señalado
el Señor. El Señor nos Bendiga y nos guarde Pedro Octubre de 2005 |
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