MISA DIARIA DE CAMINANDO
CON JESUS
"La Eucaristía es fuente
y culmen de toda la vida cristiana" (LG 11)
|
Página de
Pedro Sergio Antonio Donoso Brant
22 años en
Internet
La edición
de la Misa Diaria, Reflexión Bíblica, Lectio Divina y Santoral, enviada por
correo por sistema de grupos, es las más antigua de Internet, comenzó en el
año 1998 y hoy llega a más de 23.600 suscriptores. Si desea suscribirse o
comunicar algo, escriba al correo electrónico pedrodonosobrant@caminandoconjesus.cl
|
Este subsidio está publicado todos los días en la página WEB en
este link: MISA DIARIA
Cantidad de visitas acumuladas desde el año 2003
al ENLACE Misa Diaria:
|
WEB: www.caminando-con-jesus.org www.caminando-con-maria.org www.santateresadelosandes.cl
|
Suscriptores:
23.705
|
08-03-2020
|
Nº MD 7.839
|
LITURGIA
DE LAS HORAS
|
|
En este link, están disponible recursos para
la CUARESMA
|
Domingo II de Cuaresma Ciclo A
SAL DE TU TIERRA
La llamada a la conversión que
la Iglesia nos ha dirigido en el primer domingo, ahora se precisa más. La
conversión sólo es posible mirando a Cristo, dejándonos cautivar por su
infinito atractivo: “¡Señor, ¡qué bien estamos aquí!”. Contemplando
a Cristo también nosotros vamos siendo transfigurados; recibiendo su luz
vamos siendo transformados en una imagen cada vez más perfecta del Señor (2
Cor 3,18).
“Él nos salvó y os eligió con
su santo llamado” (segunda lectura). La conversión no es poner
algún parche o remiendo a los defectos más gruesos. Cristo quiere hacernos
santos. Y la conversión está en función de esta vida santa a la que nos
llama. Él no se conforma con menos. La conversión es continua, hasta que quede
perfectamente restaurada en nosotros la imagen de Dios, hasta que Cristo
sea plenamente formado en nosotros (Gal 4,19). Dejar de lado la conversión
es olvidar que hemos sido llamados a una vida santa y es despreciar a
Cristo que nos llama a ella.
“Sal de tu tierra” (primera lectura).
También a nosotros se nos dirige esta llamada, como a Abraham. Conversión
significa salir de nosotros mismos, romper con nuestra instalación y
nuestras seguridades, dejar nuestros egoísmos y comodidades... Llamada a la
santidad significa ponernos en camino hacia la tierra que el Señor nos
mostrará, con entera disponibilidad a su voluntad, a los planes que nos irá
manifestando, para que nos lleve a donde Él quiera, cuando y como Él
quiera.
“Sal de tu tierra” significa también “Comparte
conmigo los sufrimientos que es necesario padecer por el Evangelio, animado
con la fortaleza de Dios” (segunda lectura), es decir, colabora con
todas tus energías para que muchos otros reciban la buena noticia de que
pueden convertirse y ser santos. He ahí el profundo sentido apostólico,
evangelizador y misionero de la Cuaresma. El Señor nos ofrece, como a
Abraham: “Yo haré de ti Una gran nación”. El Señor desea que demos
fruto abundante (Jn 15,16). Pero una vida mediocre es una vida estéril. De
nuestra conversión y santidad depende que nuestra vida sea fecunda.
Para ver la Reflexión completa de las Lecturas
de la Liturgia de este domingo (Primera Lectura, Segunda Lectura, Evangelio
y el Salmo) pinchar este link: (Enlace): PALABRA DE DIOS
|
ANTÍFONA
DE ENTRADA Sal 26, 8.9
Mi
corazón sabe que dijiste: busquen mi rostro. Yo busco tu rostro, Señor, no
apartes de mí.
O
bien:
Cfr.
SaI 24, 6.2.22
Acuérdate,
Señor, de tu compasión y de tu amor, que son eternos: que nuestros enemigos
no triunfen sobre nosotros. Dios de Israel, líbranos de todas nuestras
angustias.
ACTO PENITENCIAL
·
Tú nos salvaste: Cuando nuestra
fe no es pronta y generosa. Señor, ten piedad.
·
Tú has destruido la muerte:
Cuando no compartimos los trabajos por el Evangelio. Cristo, ten piedad
·
Tú, Hijo amado del Padre:
Cuando no te escuchamos con fe y alegría. Señor, ten piedad.
No se
dice Gloria
ORACIÓN
COLECTA
Padre
santo, que nos mandaste escuchar a tu Hijo amado, alimenta nuestro espíritu
con tu Palabra, para que, después de haber purificado nuestra mirada
interior, podamos contemplar gozosos la gloria de su rostro. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu
Santo, yes Dios, por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA Gn12,1-4
Como
a Abram, Dios nos invita a dejar seguridades y comodidades que nos
estancan, y a realizar su plan para cada uno de nosotros, que consiste en
la verdadera felicidad temporal y eterna.
Lectura del libro del Génesis.
El
Señor dijo a Abrám: “Deja tu tierra natal y la casa de tu padre, y ve al
país que Yo te mostraré. Yo haré de ti Una gran nación y te bendeciré;
engrandeceré tu nombre y serás una bendición. Bendeçiré
a los que te bendigan y maldeciré al que te maldiga, y por ti se bendecirán
todos los pueblos de la tierra”. Abrám partió, como el Señor se lo había
ordenado.
Palabra de Dios.
SALMO
Sal 32, 4-5. 18-20. 22
R. Señor, que descienda tu amor sobre nosotros.
La
palabra del Señores recta y Él obra siempre con lealtad; El ama la justicia
y el derecho, y la tierra está llena de su amor. R.
Los
ojos del Señor están fijos sobre sus fieles, sobre los que esperan en su
misericordia, para librar sus vidas de la muerte y sustentarlos en’ el
tiempo de indigencia. R.
Nuestra
alma espera en el’ Señor: Él es nuestra ayuda y nuestro escudo. Señor, que
tu amor descienda sobre nosotros, conforme a la esperanza que tenemos en
ti. R.
SEGUDA
LECTURA 2Tim 1, 8-10
Cristo
nos llama a, una vida santa, que es unión con él, compartiendo su cruz con
nuestra cruz de cada día, para compartir su victoria sobre la muerte por la
resurrección a la vida inmortal.
Lectura de la segunda carta del Apóstol san Pablo
a Timoteo.
Querido
hijo: Comparte conmigo os sufrimientos que es necesario padecer por el
Evangelio, animado con la fortaleza de Dios. El
nos salvó y os eligió con su santo llamado, no por nuestras obras, sino por
su propia iniciativa y por la gracia: esa gracia que nos concedió en Cristo
Jesús, desde toda la eternidad, y que ahora se ha revelado en la
Manifestación de nuestro Salvador Jesucristo. Porque El destruyó la muerte
e hizo brillar la vida incorruptible, mediante la Buena Noticia.
Palabra de Dios.
EVANGELIO Mt 17, 1-9
Seguir
a Jesús nos proporciona momentos de transfiguración gozosa; pero estos no
duran mucho, como quisiéramos, porque la definitiva transfiguración se nos
dará sólo con la resurrección.
Evangelio de nuestro Señor
Jesucristo según san Mateo.
Jesús tomó a Pedro, a Santiago y a su hermano
Juan, y los llevó aparte a un monte elevado. Allí se transfiguró en
presencia de ellos: su rostro resplandecía como el sol y sus vestiduras se
volvieron blancas como la luz. De pronto se les aparecieron Moisés y Elías,
hablando con Jesús. Pedro dijo a Jesús: “Señor, ¡qué bien estamos aquí! Si
quieres, levantaré aquí mismo tres carpas, una para ti, otra para Moisés y
otra para Elías”. Todavía estaba habiendo, cuando una nube luminosa los
cubrió con su sombra y se oyó una voz qué decía desde la nube: “Este es mi
Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo”. Al
oír esto, los discípulos -cayeron con el rostro en tierra, llenos de temor.
Jesús se acercó a ellos y, tocándolos, les dijo: “Levántense, no tengan
miedo”. Cuando alzaron los ojos, no vieron a nadie más que á Jesús solo. Mientras bajaban del monte, Jesús les
ordenó: “No hablen a nadie de esta visión, hasta que el Hijo del hombre
resucite de entre los muertos”.
Palabra del Señor.
Se
dice el Credo
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Te
pedimos, Señor, que este sacrificio, borre nuestros pecados y santifique el
cuerpo y el alma de tus fieles, para que podamos celebrar dignamente las
fiestas pascuales. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO
LA
TRANSFIGURACIÓN DEL SEÑOR
El
Señor esté con ustedes.
R.
Y con tu espíritu.
V.
Levantemos el corazón.
R.
Lo tenemos levantado hacia el Señor.
y.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
R.
Es justo y necesario.
En
verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias
siempre y e todo lugar, Señor, Padre santo, Dios
todopoderoso y eterno, por Cristo, señor Nuestro. El mismo, después de
anunciar su muerte a los discípulos, les reveló el esplendor de su gloria
en la montaña santa, para mostrar, con el testimonio de la Ley y los
Profetas, que por la pasión debía llegar a la gloria de la resurrección.
Por eso con los coros celestiales, te alabamos en la tierra llenos de
alegría, cantando sin cesar:
Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA
DE COMUNIÓN Mi 17,5
Éste
es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Después
de haber recibido estos gloriosos misterios, Padre, te damos gracias
porque, aun viviendo en la tierra, ya nos haces partícipes de ¡os bienes
del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
|
REFLEXIÓN
BÍBLICA
|
“Este
es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo”
Mt
17, 1-9
Autor:
Pedro Sergio Antonio Donoso Brant
5.1 JESÚS TOMÓ A PEDRO, A SANTIAGO Y A JUAN
En aquel tiempo, “Jesús tomó a Pedro, a
Santiago y a Juan, el hermano de éste, y los hizo subir a solas con él a un
monte elevado”. A diferencia de otros fragmentos de los evangelios,
en este no se precisa el nombre del lugar, Mateo dice que es un monte
elevado, pero la tradición lo ha localizado en el Tabor, de aproximadamente
600 metros de altura sobre la llanura. Jesús tomó a Pedro, Juan y Santiago,
y subió a la montaña para orar. En otra ocasiones, él ha subido al monte a
orar solo, (Mt 14, 23) en esta ocasión ha invitado a tres de sus apóstoles
y, los ha escogido como testigos para una gran acontecimiento. Ellos son
los mismos apóstoles que luego serán testigo de su agonía en Getsemaní. Se
podría pensar que ocupaban un lugar privilegiado de entre sus apóstoles. Ellos
se sentían muy bien el estar allí.
5.2 JESÚS HABÍA SUBIDO ORAR
La primera enseñanza importante es, que Jesús
había subido orar, él siempre lo está haciendo, es un modelo que debemos
hacerlo parte de nuestra vida diaria, orar al Padre. En esta ocasión invita
tres de sus amigos íntimos, entregándonos una gran oportunidad para
aprender de este ejemplo, cuando Jesús invita a seguirlo, es porque nos
está dando la oportunidad de ser testigo de las maravillas del Señor, como
para darnos a conocer cada instante de su vida. Prestemos atención a las
invitaciones que nos hace Jesús, tengamos disposición de atender sus
palabras, y guardar silencio para oírlo.
5.3 SU ROSTRO RESPLANDECIA
En aquella elevada soledad Jesús les muestra su
aspecto divino "cambiando de aspecto". De acuerdo al relato de
Lucas, mientras Jesús oraba, su rostro cambió de aspecto y sus vestiduras
se volvieron de una blancura deslumbrante. Ahí se transfiguró en presencia
de sus apóstoles, y como dice Mateo, insiste particularmente en la luz y el
fulgor que emanan de él, “su rostro resplandecía como el sol y
sus vestiduras se volvieron blancas como la luz. De pronto aparecieron ante
ellos Moisés y Elías, conversando con Jesús” según Lucas, también
aparecen resplandecientes.
5.4 LA TRANSFIGURACIÓN, ES UNA EXPERIENCIA PROFUNDA
La transfiguración, es una experiencia profunda
de fe tenida por Pedro, Juan y Santiago, los amigos más íntimos de Jesús.
Así es, que como para llegar a conocer los momentos más transcendentes de
Jesús, necesitamos ser sus amigos íntimos, con una comunicación profunda,
como la que ellos tuvieron para percibir a Jesús en su verdadera identidad.
Debe haber sido un instante de éxtasis, vieron la
realidad gloriosa de Jesús, aunque no se les mostró en toda su magnitud,
porque para llegar a entenderlo, tuvieron que conocer a través de la vida,
pasión y muerte y de sus propios sufrimientos y muerte, que hay que pasar
por esta última, la muerte, para llegar a la vida.
5.5 JESÚS NOS TRANSFIGURA NUESTRA VIDA
Jesús nos transfigura nuestra vida, Él nos ayuda
a descubrir la presencia de Dios en nosotros y nos llama a ser sus testigos
ante un mundo de contradicciones.
Entonces “Pedro dijo a Jesús: “Señor, ¡qué bien
estamos aquí! Si quieres, levantaré aquí mismo tres carpas, una para ti,
otra para Moisés y otra para Elías.” Muchas veces soñamos con
grandes templos y majestuosos, no preocupamos por construir bellas Iglesias
o templos muy bien ambientados para Dios, sin embargo siempre debemos
recordar que el lugar favorito de El no deja de ser aquí entre nosotros, en
el corazón de todos los hombres, en nuestra familia, junto a los niños, a
los trabajadores, a los religiosos, sacerdotes, laicos, y con gran
privilegio donde la calidez del amor está presente.
5.6 ESTE ES MI HIJO MUY AMADO
Cuando aún estaba hablando, una nube luminosa los
cubrió y de ella salió una voz que decía: “Este es mi Hijo muy querido,
en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo”. La
manifestación de esta nube luminosa, es una revelación de la divinidad, lo
que los teólogos llaman teofanía, es el símbolo de la presencia de Dios, y
en ese momento sucede allí. Dice el Evangelio que al oír esto, los
discípulos cayeron rostro en tierra, llenos de un gran temor, esto es
porque en el Antiguo Testamento se decía que no se podía ver a Dios y vivir
(Ex 33:19; Lev 14:13; etc.). Esto es lo que se acusa aquí.
5.7 ESCUCHAR A SU HIJO AMADO
Pero debemos comprender, que esta es nuestra gran
instrucción que nos solicita Dios, escuchar a su Hijo amado, y eso nos debe
caracterizar para ser un servidor de verdad, oír siempre a Jesús, esta
actitud receptiva es para la palabra y la total aceptación de Cristo, es
una invitación a descubrir lo divino de sus enseñanzas y toda su obra. En
esta proclamación que hace el Padre de su Hijo, lo muestra como Dios,
revelando la filiación divina de Jesús.
Por esos, la transfiguración consiste
esencialmente en la toma de conciencia, por parte de los tres apóstoles, de
que Jesús es verdaderamente el Mesías y además también revela que la
persona de Jesús, es el Hijo muy amado del Padre y trascendente que posee
su misma gloria divina.
5.8 LEVÁNTENSE Y NO TEMAN.
Ante esta manifestación extraordinaria de gloria,
un gran temor se apodera de los discípulos. Jesús los reanima con su gesto
y su palabra como el Hijo del hombre de la visión de Daniel. Luego, Jesús
se acercó a ellos, los tocó y les dijo: “Levántense, no tengan
miedo”. Cuando alzaron los ojos, no vieron a nadie más que a Jesús solo.”
Se vuelve más desconcertante e incomprensible a
los discípulos lo que Jesús les dice mientras bajaban del monte, el Hijo
del hombre -la figura gloriosa esperada como conclusión de la historia-
deberá afrontar la muerte y resucitar. Entonces les ordenó: “No
hablen a nadie de esta visión, hasta que el Hijo del hombre resucite de
entre los muertos”.
5.9 ESTAMOS LLAMADOS TAMBIÉN A TRANSFIGURARNOS
Dios se le muestra al elegido y amado, de tiempo
en tiempo, algún reflejo del rostro divino, como una luz oculta entre las
manos que de vez en cuando y en otras se
esconde, como cada uno lo quiera hacer, para que, por estos reflejos
momentáneos y fugitivos, se inflame el alma en deseos de la plena posesión
de la luz eterna y de la herencia en la total visión de Dios, invitando a
transfigurarnos en El.
Es así como también estamos llamados a
transfigurarnos cada vez más por la acción del Señor, la sociedad, el
mundo, y nosotros en él, se transformara cada vez que aceptamos la voz del
Padre en su Hijo, cuando escuchamos su Palabra y la llevamos a la vida.
Aceptar las palabras de Jesús, es una invitación a transfigurarnos, es
decir a transformarnos en hombres buenos, y salir al mundo a hacer el bien.
"Envía tu luz y tu verdad; que ellas me
guíen hasta tu monte santo, hasta tu morada" (Sal 42,3).
El Señor les Bendiga
Pedro Sergio Antonio Donoso
Brant
II Domingo de Cuaresma Ciclo “A”
|
PARA LA LECTIO DIVINA (3)
|
ÉL ES EL HIJO
PREDILECTO QUE CUMPLIRÁ SU DESIGNIO
La liturgia de la Palabra de hoy propone a nuestra contemplación la
luz que irradia la persona de Jesús transfigurado: es un desgarrarse el
cielo, un rayo de luz eterna que llega al corazón para herirlo con la
nostalgia del rostro de Dios. Estamos llamados a participar no de una
visión desencarnada, falsamente mística, idílica. A través de todas las
lecturas podemos seguir un hilo de oro: el del don de sí mismo como
condición de la verdadera comunión con Dios.
El Padre, origen de toda paternidad, revela su corazón haciéndonos
revivir con Abrahán el sacrificio y la paz de la ofrenda suprema. A cada
uno de nosotros se nos puede pedir -más bien, se nos pide ciertamente- el
sacrificio del propio Isaac. Pero la Palabra nos deja entrever que éste es
el camino para participar de la misma realidad de Dios. El mismo Dios Padre
no perdonó a su propio Hijo, el predilecto, sino que lo entregó por
nosotros. Cristo no consideró "un tesoro codiciable el ser igual a Dios"
(cf. Flp 2,6), sino que nos amó y se entregó a sí mismo por nosotros. ¿No
renunciaremos nosotros a todo, no nos negaremos a nosotros mismos para
entrar en comunión con él?
En la transfiguración, Jesús ofrece a los tres discípulos la visión
luminosa para mostrarles el final del oscuro túnel de la pasión, poco antes
anunciada. Ahí está la voz del Padre para confirmarlo: él es el Hijo
predilecto que cumplirá su designio; es el testimonio veraz cuando pide a
sus seguidores negarse a sí mismos y llevar la propia cruz detrás de él.
Todo esto debería quedar claro a los discípulos y a nosotros. Pero
todavía tiene su mezcla de oscuridad: la nube de luz de la Presencia de
Dios nos envuelve siempre en la sombra, y la revelación no elimina el
misterio. Sin embargo, queda algo indeleble en el corazón: Jesús es el Hijo
que el Padre ha entregado por nosotros; el compañero que nos abre el
camino, el que nos enseña a escuchar dando los pasos de una entrega sin
reservas.
|
ORACION (3)
|
Oh Padre, ternura infinita, por nosotros no te has reservado a tu
único Hijo: tu corazón divino conoce el desgarro mayor, que es a la vez el
purísimo gozo de amar. Concédeme, Padre, saber corresponder a tu don con el
abandono confiado a tus manos y ofreciéndote lo mejor que tenemos. Ayúdanos
a acoger humildemente esa muerte que se nos pide cada día y que es nuestra
entrega total: el sacrificio de nosotros mismos por la vida del mundo.
Plásmanos con la sabiduría del Espíritu a imagen de tu Hijo; hombres nuevos,
en él viviremos como hijos, con él nos ofrecemos por todos los hermanos: es
la única gloria que vale la pena, es el amor que transfigura la oscuridad
del tiempo presente en luz de eternidad.
|
SANTORAL (4)
|
SAN JUAN DE DIOS 1495-1550
La presencia de los Hermanos de San Juan
de en tantos hospitales o centros psiquiátricos ha difundido por el
mundo entero el nombre de aquel que les confirió el impulso de su caridad,
sin haber imaginado nunca él mismo que fundaba una Orden religiosa.
«Si se perdiese la misericordia, se hallaría en
vos», le dijo alguien cierta vez, y el comentario le define, pero antes de
descubrirse a sí mismo Juan Ciudad, porque éste era su nombre, iba a vivir
en el aturdimiento de quien busca lo que no sabe que anda buscando.
Nacido de padres menestrales en la población
portuguesa de Montemayor el Nuevo, en la diócesis de Évora, a los ocho años
dejó a los suyos para ver mundo, es pastor en Oropesa, provincia de Toledo,
quieren casarle con la hija del amo, y él vuelve a echarse a los caminos
prefiriendo la aventura de la guerra.
Aunque triunfa su Tercio, él se ve a punto de
ser ahorcado por no haber sabido guardar un depósito militar. Y vuelve a
Oropesa.
Cuatro años después se alista en otro Tercio
que acude a rechazar de Austria y Hungría al gran turco Solimán II.
Regresa por mar a la Coruña y peregrina a
Santiago de Compostela. Llega a Montemor, pero
sus padres han muerto. En Ayamonte, atiende a los enfermos del Santo
Hospital. Trabaja una temporada en un cortijo de Sevilla y después en la
fortificación de Ceuta como peón albañil para ayudar a una familia
necesitada.
Finalmente se hace vendedor de libros piadosos
y estampas desde Gibraltar y Algeciras a Granada. ¿Será el fin de tanto ir
y venir? Sus padres han muerto, y ese hombre inquieto y sin arraigo
continúa sus vagabundeos cada vez más movido por la piedad y la caridad.
A los 42 años llega a Granada. Allí se realizó
su conversión. "Granada será tu cruz", le dice el Señor. Desde
ahora se llamará Juan de Dios. Predicaba en Granada San Juan de Ávila, y
con tales colores y tonos predicó sobre la belleza de la virtud y sobre la
fealdad del pecado, con tantos ardores habló sobre el amor de Dios, que
Juan se sintió como herido por un rayo. Se tiraba por el suelo, mientras
repetía: "Misericordia, Señor, misericordia". Quemó los libros
que vendía de caballería, repartió los piadosos, lo dio todo, y corrió por
las calles de la ciudad descalzo y gritando sus pecados y su
arrepentimiento como uno que ha perdido el juicio.
Los niños le seguían burlándose: ¡Al loco, al
loco! Nadie entendía aquella divina locura y llegan a internarle en un
manicomio. Sólo Juan de Ávila que le animó a encauzar aquellos arrebatos en
alguna obra permanente de caridad. Y Juan concentró ahora todo su
entusiasmo en una nueva Orden: La Orden de los Hermanos Hospitalarios de
San Juan de Dios.
Sus primeros compañeros los reclutó el fundador
entre la gente más desarrapada: un alcahuete, un asesino, un espía y un
usurero. Esa es la fuerza del amor. Un converso que saca del fango a cuatro
truhanes y los hace héroes cristianos. Sobre
estas cuatro columnas apoyará su obra.
Peregrina a Guadalupe. Vuelve a Granada y con
la ayuda del arzobispo de Granada recoge en un asilo a los desesperados de
todas clases: enfermos, viudas, huérfanos, ancianos, inválidos, locos,
hambrientos, vagabundos, prostitutas, y va a pedir limosna por las calles
con una espuerta y dos marmitas colgadas al cuello, andrajoso y gritando:
«Hermanos, haced bien para vosotros mismos», recoge los primeros enfermos.
Es el precursor de la beneficencia moderna. Acoge a los enfermos, los cura,
los limpia, los consuela, les da de comer. Todo es limpieza, orden y paz en
la casa. Por la noche mendiga por la ciudad para los enfermos.
Todos se le abren. Todos le ayudan. Es muy
expresivo el cuadro de Murillo: va el Santo con el cesto lleno por la
ciudad, carga con un enfermo ulceroso que representa a Jesucristo y un
ángel le sostiene y le guía.
Un día se declaró un incendio en el Hospital.
Había peligro de que todos los enfermos quedaran abrasados. Juan de Dios,
desoyendo a los prudentes, se metió en el fuego, dispuesto a dar la vida,
cogió uno a uno sobre sus espaldas y los salvó a todos. A él únicamente se
le chamuscaron los vestidos. Las llamas de su amor fueron más fuertes que
el fuego.
Los enfermos crecían. Salió Juan a colectar por
Andalucía, y por Toledo hasta Valladolid. Felipe II le favoreció regiamente.
Al volver enfermó. Se enteró que el Genil arrastraba mucha madera. Bien le
vendría para sus enfermos. Se levantó y se lanzó al río. Vio además que un
joven se ahogaba. El esfuerzo supremo que hizo por salvarle acabó de agotar
sus fuerzas.
Su lecho fue un desfile continuo de gentes que
querían ver a su padre y bienhechor, hasta los gitanos del Sacromonte y del
Albaicín. Esperó la muerte de rodillas, y mirando al crucifijo dejó de
latir su ardiente corazón.
|
FUENTES DE LA PAGINA
|
La Pagina de la Misa Diaria, esta preparada y es
enviada por Pedro S. A. Donoso Brant ocds, desde Santiago de Chile, como un
servicio de apostolado, amor por Nuestro Señor Jesucristo y por la Iglesia.
Les ruego su oración, para que pueda mantenerse este servicio y subsidio,
dando gracias a nuestro Dios que tanto nos ama.
Nota: Para la Liturgia de la Palabra, utilizo
“Liturgia Cotidiana” de Ediciones San Pablo, para el estudio y comentario
de la Palabra, utilizo los textos de la Biblia Nácar-Colunga, (SBNC) y/o
Biblia de Jerusalén (SBJ),
(3)
Para la Lectio Divina, Lectio Divina para cada día del año, de Giorgio
Zevini y Pier Giordano Cabra (Eds.) y/o, Intimidad Divina, Fr. Gabriel de
Santa M. Magdalena ocd,
(4) Santoral preparado por la Parroquia de la
Sagrada Familia de Vigo.
ESTA PERMITIDO EL RE-ENVIO, LA COPIA Y LA
PUBLICACIÓN DE ESTA PAGINA, SOLO DEBE INDICARSE EL AUTOR Y LAS FUENTES DE
ORIGEN
Nota sobre la publicidad: La publicidad que pueda aparecer
debajo de esta pagina, no es de responsabilidad de Caminando con Jesús.
Este es un servicio gratuito, no recibe ningún tipo de ayuda económica y no
la busca, gratuito hemos recibido mucho, gratuito queremos dar todo lo
mejor que podamos, pero sin en esa publicidad no podría llegar hasta sus
correos este servicio, que hoy ya llega a mas de 19.000 correos.
|
Suscríbete a Misa Diaria
en http://www.egrupos.net/grupo/misadiaria/alta
o
http://www.egrupos.net/grupo/caminando-con-jesus/alta
O
Escribe a caminandoconjesus@vtr.net
http://www.egrupos.net/grupo/caminando-con-jesus
http://www.egrupos.net/grupo/misadiaria
http://www.egrupos.net/grupo/montecarmelo
Por favor, no enviar cadenas, presentaciones que
excedan en más de 1Mb, correos sin asunto (no se abre). El correo cuenta con servicio automático
para rechazar spam, y no recibe, correos reenviados o correos sin datos de
quien los envía.
Si no
desea seguir recibiendo este correo por favor avíseme para retirarlo del
listado.
|
www.caminando-con-jesus.org www.caminando-con-maria.org
caminandoconjesus@vtr.net
|
|