MISA DIARIA DE CAMINANDO CON JESUS

"La Eucaristía es fuente y culmen de toda la vida cristiana" (LG 11)

cid/image001.jpg@01D09552.19F974A0

Página de Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

23 años en Internet, desde 1998

 

La edición de la Misa Diaria, Reflexión Bíblica, Lectio Divina y Santoral, enviada por correo por sistema de grupos, es las más antigua de Internet, comenzó en el año 1998 y hoy llega a más de 23.800 suscriptores de 56 países distintos. Se envía desde Santiago de Chile. Si desea suscribirse o comunicar algo, escriba al correo electrónico:  caminandoconjesus@vtr.net

Este subsidio está publicado todos los días en la página WEB en este linkMISA DIARIA

facebook

Cantidad de correos abierto acumulados a la fecha:  Contador Gratis

www.caminando-con-jesus.org        www.caminando-con-maria.org      www.santateresadelosandes.cl

Suscriptores: 23.800

31-10-2021

Nº MD 9.062

La liturgia de las horas:liturgiadelashoras.i

 

DOMINGO XXXI

AMAR AL SEÑOR CON TODO LO NUESTRO

bto31El Evangelio de hoy, nos presenta a un escriba a quien Jesús declara que no está lejos del Reino de Dios (12,28-34). Obedeciendo a la voluntad de Dios revelada por Moisés (Primera Lectura: Dt 6,2-6) sintoniza con lo esencial del mensaje de Jesús. La esencia de éste une inseparablemente el amor a Dios y el amor al prójimo. Y este doble amor constituye la base del culto verdadero y perfecto. Y con todo el corazón

Amarás al Señor. Este es el mandamiento primero y principal. De nada servirá cumplir todos los demás mandamientos sin cumplir este. El amor al Señor da sentido y valor a cada mandamiento, a cada acto de fidelidad. Para esto hemos sido creados, para amar a Dios. Y sólo este amor da sentido a nuestra vida, sólo Él nos puede hacer felices, sólo Él hace que nos vaya bien. Pues el amor a Dios no es una simple obligación, sino una necesidad, una tendencia espontánea al experimentar que “Él nos amó primero” (1Jn 4,16).

Con toda tu alma. Precisamente porque el amor de Dios a nosotros ha sido y es sin medida (cfr. Ef 3,19), el nuestro para con él no puede ser a ratos o en parte. No importa que seamos poca cosa y limitados; la autenticidad de nuestro amor se manifiesta en que es total, en que no se reserve nada: todo nuestro tiempo, todas nuestras energías y capacidades, todos nuestros bienes... Al Dios que es único le corresponde la totalidad de nuestro ser.

Como a ti mismo. No es difícil entender cómo ha de ser nuestro amor al prójimo. Basta observar cómo nos amamos a nosotros mismos... y comparar. Podemos y debemos amar al prójimo como a nosotros mismos porque forma parte de nosotros mismos, porque no nos es ajeno. “No hay judío o griego, esclavo o libre, hombre o mujer, porque todos sois uno en Cristo Jesús” (Gál 3,28). Gracias a Cristo, el prójimo ha dejado de ser un extraño.

Para ver la Reflexión completa de las 3 lecturas y el salmo de la Liturgia de este domingo XXXI, pinchar este link: (Enlace): PALABRA DE DIOS

 

MOTIVACIÓN DE ENTRADA; Guía: Vamos hacia el final del año litúrgico. La fugacidad de la vida debe ayudarnos a orientar nuestra existencia hacia el Señor. Supliquemos con el Salmo: œNo nos abandones, Señor, Dios nuestro, no te quedes lejos; ven a socorremos, Señor nuestro, nuestra salvación (Sal 37).

ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 37, 22-23

Señor, no me abandones, Dios mío, no te quedes lejos de mí; apresúrate a venir en mi ayuda, mi Señor, mi Salvador.

ORACIÓN COLECTA

Dios omnipotente y lleno de misericordia, que concedes a tus fieles celebrar dignamente esta liturgia de alabanza; te pedimos que nos ayudes a caminar sin tropiezos hacia los bienes prometidos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.

PRIMERA LECTURA

Dios quiere que sus mandamientos echen raíces en nuestro corazón. Esto es posible si los cumplimos por y con amor, con toda el alma.

Lectura del libro del Deuteronomio 6, 1-6

Moisés habló al pueblo diciendo: Éste es el mandamiento, y éstos son los preceptos y las leyes que el Señor, su Dios, ordenó que les enseñara a practicar en el país del que van a tomar posesión, a fin de que temas al Señor, tu Dios, observando constantemente todos los preceptos y mandamientos que yo te prescribo, y así tengas una larga vida, lo mismo que tu hijo y tu nieto. Por eso, escucha, Israel, y empéñate en cumplirlos. Así gozarás de bienestar y llegarás a ser muy numeroso en la tierra que mana leche y miel, como el Señor, tu Dios, te lo ha prometido. Escucha, Israel: el Señor, nuestro Dios, es el único Señor. Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas. Graba en tu corazón estas palabras que yo te dicto hoy.

Palabra de Dios.

SALMO Sal 17, 2-4. 47. 51

R. Yo te amo, Señor, mi fortaleza.

Yo te amo, Señor, mi fuerza, Señor, mi Roca, mi fortaleza y mi libertador. R.

Mi Dios, el peñasco en que me refugio, mi escudo, mi fuerza salvadora, mi baluarte. Invoqué al Señor, que es digno de alabanza y quedé a salvo de mis enemigos. R.

¡Viva el Señor! ¡Bendita sea mi Roca! ¡Glorificado sea el Dios de mi salvación! Él concede grandes victorias a su rey y trata con fidelidad a su Ungido. R.

SEGUNDA LECTURA Heb 7, 23-28

Cristo posee un sacerdocio eterno, que puede salvar a quienes se acercan a Dios por medio de él. Él vive siempre intercediendo por nosotros.

Lectura de la carta a los Hebreos

Hermanos: En la antigua Alianza los sacerdotes tuvieron que ser muchos, porque la muerte les impedía permanecer; pero Jesús, como permanece para siempre, posee un sacerdocio inmutable. De ahí que Él puede salvar en forma definitiva a los que se acercan a Dios por su intermedio, ya que vive eternamente para interceder por ellos. Él es el Sumo Sacerdote que necesitábamos: santo, inocente, sin mancha, separado de los pecadores y elevado por encima del cielo. Él no tiene necesidad, como los otros sumos sacerdotes, de ofrecer sacrificios cada día, primero por sus pecados, y después por los del pueblo. Esto lo hizo de una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. La Ley, en efecto, establece como sumos sacerdotes a hombres débiles; en cambio, la palabra del juramento ’que es posterior a la Ley’ establece a un Hijo que llegó a ser perfecto para siempre.

Palabra de Dios.

ALELUYA Jn 14, 23

Aleluya. «El que me ama, será fiel a mi palabra, y mi Padre lo amará e iremos a él», dice el Señor. Aleluya.

EVANGELIO Mc 12, 28-34

El amor a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a nosotros mismos, es el mandamiento más importante para el cristiano.

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Marcos.

Un escriba se acercó a Jesús y le preguntó: «¿Cuál es el primero de los mandamientos?» Jesús respondió: «El primero es: "Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor; y tú amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y con todas tus fuerzas". El segundo es: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo". No hay otro mandamiento más grande que éstos». El escriba le dijo: «Muy bien, Maestro, tienes razón al decir que hay un solo Dios y no hay otro más que Él, y que amarlo con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a sí mismo, vale más que todos los holocaustos y todos los sacrificios». Jesús, al ver que había respondido tan acertadamente, le dijo: «Tú no estás lejos del Reino de Dios». Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas.

Palabra del Señor.

PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS; El pan y el vino son signos del único pan de Vida que es Cristo. Los ofrecemos con el profundo deseo de una vida coherente que integre en nosotros la fe y las obras.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Te pedimos, Señor, que este sacrificio sea para ti una ofrenda pura, y para nosotros una fuente generosa de tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor.

PREPARACIÓN PARA LA COMUNIÓN

Guía: La comunión sacramental sea signo y anticipación de la comunión definitiva con Cristo.

ANTÍFONA DE COMUNIÓN Cfr. Sal 15, 11

Señor, me darás a conocer el camino de la vida, saciándome de gozo en tu presencia.

O bien: Cfr. Jn 6, 57

Dice el Señor: así como yo, que he sido enviado por el Padre que tiene vida, vivo por el Padre, el que me come vivirá por mí.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Te pedimos, Padre, que crezca en nosotros la acción de tu poder para que, restaurados con estos sacramentos celestiales, tu gracia nos prepare a recibir lo que ellos nos prometen. Por Jesucristo, nuestro Señor.

DESPEDIDA; Volvamos a nuestro barrio, a nuestra casa y actividades, alabando a Dios Padre que nos ha congregado en nombre de Jesús y que, con la fuerza del Espíritu Santo, nos da la fuerza de comunicarlo a todos

  REFLEXIÓN BÍBLICA

 

“amarás al Señor, tu Dios y amarás a tu prójimo como a ti mismo”

Mc12, 28-34

Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant 

1.  ¿CUÁL ES EL PRIMERO DE LOS MANDAMIENTOS?

Un escriba que oyó discutir a Jesús con los saduceos, al ver que les había respondido bien, se acercó y le preguntó: “¿Cuál es el primero de los mandamientos?”

Este relato, está en los tres Evangelios sinópticos, en San Marcos la pregunta se la hace en un tono de respeto, sin embargo en los relatos de San Mateo, y más en San Lucas, en un sentido hostil. Es cuestión del estilo redaccional de cada evangelista. La diferencia entre los saduceos y los fariseos es que los fariseos se caracterizaban por su rigor y austeridad en el cumplimiento de la letra de la ley y en la atención a los aspectos externos de los preceptos religiosos y los saduceos eran ciertas personas, que pertenecían a la aristocracia sacerdotal judía que negaban la inmortalidad del alma.

En este Evangelio, se le acerca ahora a Jesús un escriba. ¿Qué busca?, él quiere probar la opinión de Jesús, con habilidad y astucia, quizás para conseguir algo con oscuros propósitos y así comprometerlo, en otras palabras, mediante una treta, busca como perjudicar a Jesús.

El tema del primer mandamiento era muy discutido en las escuelas rabínicas. Pero San Marcos es el que destaca la argumentación basándose en que Dios es único; luego exige la plenitud de amor y servicio. La repetición de corazón, alma y mente es el procedimiento semita de prueba por acumulación.

Pero en el amor a Dios va incluido el amor al prójimo, todo ser humano, que es lo que destaca especialmente el relato que hace San Lucas en este pasaje similar (Lc 10:29ss). Pero para el judío, el prójimo era sólo el judío.

2.    AMARÁS A TU PRÓJIMO COMO A TI MISMO.

A la pregunta que hace el escriba, le responde Jesús; “El primero es: Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor; y tú amarás al Señor, tu Dios”. El Señor ha querido ver la intención, resaltada, de una cuestión apologética contra el politeísmo del medio ambiente al que se dirige el evangelio de San Marcos. Jesús luego añade; “con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y con todas tus fuerzas”. Y luego sigue; “El segundo es: Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Este es nuestro deber, amar, y con todo el corazón, sin ninguna restricción y con todo lo que nos da la vida, con toda el alma, esto con el primer principio de nuestra vida, lo más importante, la parte espiritual e inmortal, capaz de entender, querer y sentir, y que, junto con el cuerpo, constituye su esencia humana, con toda la mente, con la capacidad intelectual humana, con el pensamiento, más allá de toda imaginación y voluntad. Esto es amar con todo lo que hemos recibido de Dios, por tanto con todo lo que podemos acercarnos a Dios y estar con Él.

Así es, como Jesús, nos exige un amor total a Dios, y no aceptar en nosotros un amor parcial o limitado, y lo mismo nos enseña y nos exige, la entrega y el amor, tanto a Dios como al prójimo. Eso quizás fue sorprendente para el escriba, Jesús puso al mismo nivel los dos mandamientos, y así lo aclara el evangelio cuando en san Mateo 22,34-40, dice; De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas.

3.    SI TU AMAS A TU PRÓJIMO, AMAS A DIOS

Para nosotros, cristianos, muchas veces indignos seguidores de Jesús, debemos ser absolutamente contrarios a cualquier sentimiento acentuado de hostilidad, antipatía, rechazo y odio a los hombres, y esto es sin hacer excepciones por raza, color o nacionalidad, sin embargo, es algo con lo que convivimos a diario, está a la vista de cualquiera en la familia, en la amistad, con los vecinos, con los que piensan diferente, entre los políticos, entre las naciones y pueblos.

Nos recuerda San Pablo, para que no olvidemos; No hay judío o griego, esclavo o libre, hombre o mujer, porque todos sois uno en Cristo Jesús” (Gál 3,28).

Esto es los que nos enseña Jesús, el hombre es imagen de Dios, y si tu ama a tu prójimo, amas a Dios, y si amas a Dios, lo amas en también en el prójimo.

Estos preceptos son nuestros fundamentos de la vida cristiana, ambos basados en el amor, y por amor a Dios y al prójimo, juntos el mandamiento más grande de la Ley.

El escriba le dijo: “Muy bien, Maestro, tienes razón al decir que hay un solo Dios y no hay otro más que él, y que amarlo con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a sí mismo, vale más que todos los holocaustos y todos los sacrificios”. Jesús, al ver que había respondido tan acertadamente, le dijo: “Tú no estás lejos del Reino de Dios”. Estos Versículos son propios de San Marcos. En ellos se hace ver que el amor al prójimo es mejor que todos los holocaustos y sacrificios. En esto San Marcos se enlaza con la línea de los profetas sobre la autenticidad del culto y la misericordia (1 Re 15:22; Os 6:6). A esta valoración del escriba que le preguntó, Cristo le responde que su rectitud moral le está aproximando al reino de Dios

4.    EL COMPROMISO CON NUESTRO PRÓJIMO

El compromiso con nuestro prójimo, es impactante, con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y con todas tus fuerzas, porque si aceptamos esta responsabilidad, tengamos presente que cuando decimos con todo el corazón, es con todo lo nuestro, sin reservas, con todo tipo de sacrificios, con todo lo que nos hace vivir, cuando decimos con toda el alma, es con toda la sensibilidad del amor divino, y cuando dice con todas tus fuerzas es ardientemente y no con tibieza, y añadimos para que no falte nada, con todo nuestro entendimiento, con toda nuestra mente, con la inteligencia y la reflexión.

Pero el amor divino no se aprende. En efecto, no aprendemos de otro a amar la vida, ni amar a nuestros padres, ni a nuestros amigos, ni mucho menos podemos aprender las reglas del amor divino. Hay en nosotros cierto sentimiento íntimo que nos inclina a amar a Dios. Todo el que obedece este sentimiento y practica la doctrina de los divinos preceptos y llega a la perfección de la divina gracia. Así entonces, amamos naturalmente el bien; amamos también a nuestros prójimos y parientes, y además damos espontáneamente a los hombres de bien, todo nuestro afecto.

5.    EL, NOS MANDA AMAR AL PRÓJIMO.

Así es, como Dios es bueno, y todos deseamos lo bueno, lo que se perfecciona por nuestra voluntad reside naturalmente en nosotros. A El, aunque no le conozcamos por su bondad, pero porque procedemos de Él, tenemos obligación de amarle sobre todo, este es nuestro principio. Es también mayor bien de todos los que se aman naturalmente. El primero y principal mandamiento es, por consiguiente, el del amor a Dios. El segundo, que completa al primero y es completado por El, nos manda amar al prójimo. Por eso decimos y a tu prójimo como a ti mismo. Recibimos de Dios las fuerzas necesarias para cumplir este precepto. Nada hay tan conforme con nuestra naturaleza como el comunicarse con los demás, favorecerse mutuamente y amar a los parientes y amigos. Por ese motivo, reflexionemos además lo que nos enseña el Evangelista San Juan; “Nosotros debemos amarnos porque él nos amó primero” (1 Jn 4,19).

Y a tu prójimo como a ti mismo, lo más prójimo, es decir lo más próximo que tenemos, es quien habita en nuestro corazón, morada de Dios, a El todo nuestro amor.

“Y adonde no hay amor, ponga amor, y sacará amor” (San Juan de la Cruz)

El Señor les Bendiga

Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

XXXI Domingo Ciclo B 

PARA LA LECTIO DIVINA

 

AMARÁS AL SEÑOR, TU DIOS, CON TODO TU CORAZÓN

Son muchas las imágenes y las palabras que parecen aplastar al hombre de hoy, muchos los sacerdotes y los ritos de la antigua alianza, muchos los preceptos de la Ley...

Esta multiplicidad nos desorienta, y necesitamos volver a encontrar un centro de gravedad, un hilo conductor para el camino de la vida.

Jesús nos lleva simplemente al Uno, a aquel que es y envuelve a cada ser en su abrazo vivificante. Él es el Amor y es nuestro Dios.

¿Cómo no hemos de ofrecernos entonces a él por completo a nosotros mismos?

La multiplicidad queda unificada por el amor de Dios, que pide todo el amor del hombre. Son muchos nuestros afectos, amistades, relaciones interpersonales: a veces nos sentimos triturados.

Amar todo lo que, por otra parte, viene de él, será el Espíritu de amor el que ame en nosotros. Son muchos los pensamientos, las preocupaciones y las dudas que nos asaltan, pero si queremos amar al Señor con toda nuestra mente los afrontaremos con una paz que antes no conocíamos.

Son muchas, demasiadas, las cosas que tenemos que hacer, los compromisos a los que tenemos que hacer frente, las actividades que hemos de llevar adelante:

Amemos al Señor con todas nuestras fuerzas y él será la fuerza que nos sostenga en la vertiginosa carrera de nuestra vida cotidiana.

Si tendemos hacia esta única dirección, seremos impulsados por el mismo Señor hacia las múltiples direcciones de los hermanos.

El mandamiento del Señor es uno, pero tiene dos aspectos, porque aprender a amar con el corazón de Dios significa hacerse próximo a cada hombre: así amó Jesús. Sí, el amor “vale más que todos los holocaustos y sacrificios”, porque es sacrificio de por sí. Así se entregó Jesús.

ORACION

 

Dios nuestro, fuente única de todo lo que existe, tú eres nuestro Padre:

Concédenos el amor para que, fieles a tu mandamiento, podamos amarte con un corazón indiviso, buscándote en todas las cosas.

Enséñanos a amarte “con toda la mente”:

Ilumina nuestra inteligencia para que, libre de la duda y de la vana presunción, sepa descubrir tu designio de salvación en la historia y en las circunstancias cotidianas.

Haz que te amemos “con todas nuestras fuerzas”:

Consagrando a ti y a tu servicio nuestras capacidades y nuestros límites, nuestras acciones y nuestras impotencias, nuestros logros y nuestros fallos.

Ayúdanos, Señor, a amarte en cada hermano que tú has puesto a nuestro lado y que tú fuiste el primero en amar, hasta el sacrificio de tu propio Hijo.

Que su oblación eterna nos dé la fuerza y la alegría de perdernos a nosotros mismos en la caridad para recobrarnos plenamente en ti, que eres el Amor. 

FUENTES DE LA PAGINA

 

La Página de la Misa Diaria, está preparada y es enviada por Pedro S. A. Donoso Brant, desde Santiago de Chile, como un servicio de apostolado, amor por Nuestro Señor Jesucristo y por la Iglesia. Les ruego su oración, para que pueda mantenerse este servicio y subsidio, dando gracias a nuestro Dios que tanto nos ama.

Nota: Para la Liturgia de la Palabra, utilizo Liturgia Cotidiana de Ediciones San Pablo, para el estudio y comentario de la Palabra, utilizo los textos de la Biblia Nácar-Colunga, (SBNC) y/o Biblia de Jerusalén (SBJ),

(3) Para la Lectio Divina, Lectio Divina para cada día del año, de Giorgio Zevini y Pier Giordano Cabra (Eds.) y/o, Intimidad Divina, Fr. Gabriel de Santa M. Magdalena ocd.

 

Suscríbete a Misa Diaria

en  http://www.egrupos.net/grupo/misadiaria/alta   o

http://www.egrupos.net/grupo/caminando-con-jesus/alta o

Escribe a caminandoconjesus@vtr.net

http://www.egrupos.net/grupo/caminando-con-jesus

http://www.egrupos.net/grupo/misadiaria

http://www.egrupos.net/grupo/montecarmelo

Por favor, no enviar cadenas, presentaciones que excedan en más de 1Mb, correos sin asunto (no se abre).  El correo cuenta con servicio automático para rechazar spam, y no recibe, correos reenviados o correos sin datos de quien los envía.

Si no desea seguir recibiendo este correo por favor avíseme para retirarlo del listado al correo caminandoconjesus@vtr.net

www.caminando-con-jesus.org

www.caminando-con-maria.org

caminandoconjesus@vtr.net

Contador Gratis

Nota sobre la publicidad: La publicidad que pueda aparecer debajo de esta pagina, no es de responsabilidad de Caminando con Jesús. Este es un servicio gratuito, no recibe ningún tipo de ayuda económica y no la busca, gratuito hemos recibido mucho, gratuito queremos dar todo lo mejor que podamos, pero sin en esa publicidad no podría llegar hasta sus correos este servicio, que hoy ya llega a más de 23.000 correos