MISA DIARIA DE CAMINANDO CON JESUS

Página de Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

"La Eucaristía es fuente y culmen de toda la vida cristiana" (LG 11)

image001

25 años en Internet

Visitas acumuladas desde el año 2003:  Contador Gratis

 

La edición de la Misa Diaria, Reflexión Bíblica, Lectio Divina y Santoral es las más antigua de Internet, comenzó en el año 1998.

Si desea comunicar algo, escriba al correo electrónico: caminandoconjesus@vtr.net 

Este subsidio está publicado todos los días en el WEB www.caminando-con-jesus.org en este

ENLACE: MISA DIARIA

WEB:     www.caminando-con-jesus.org     www.caminando-con-maria.org     www.santateresadelosandes.cl

04-07-2023

Edición  9.654

LITURGIA DE   LAS HORAS 

facebook

 

ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 46, 2

Que todos los pueblos aplaudan y canten a Dios con alegría.

ORACIÓN COLECTA

Dios nuestro, que por la gracias de la adopción quisiste hacernos hijos de la luz; concédenos que no seamos envueltos en las tinieblas del error, sino que permanezcamos siempre en el esplendor de la verdad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.

LECTURA Gn 19, 15-29

COMENTARIO; En Sodoma no se encuentran ni diez justos. Abraham se da por vencido en su intento y la ciudad es arrasada. La única familia justa se salva, pero no sin dificultades. Lot tiene el corazón dividido. Por una parte, la cómoda residencia en la ciudad con sus posesiones; por otra, la necesidad de salvar la vida.

Lectura del libro del Génesis.

Cuando el Señor decidió destruir las ciudades de Sodoma y Gomorra, los ángeles instaron a Lot, diciéndole: iVamos! Saca a tu mujer y a tus dos hijas que están aquí, para que no seas aniquilado cuando la ciudad reciba su castigo». Como él no salía de su asombro, los hombres lo tomaron de la mano, lo mismo que a su esposa y a sus dos hijas, y lo sacaron de la ciudad para ponerlo fuera de peligro, porque el Señor tuvo compasión de él. Después que lo sacaron, uno de ellos dijo: «Huye, si quieres salvar la vida. No mires hacia atrás, ni te detengas en ningún lugar de la región baja. Escapa a las montañas, para no ser aniquilado». Lot respondió: «No, por favor, Señor mío. Tú has sido bondadoso con tu servidor y me has demostrado tu gran misericordia, salvándome la vida. Pero yo no podré huir a las montañas, sin que antes caigan sobre mí la destrucción y la muerte. Aquí cerca hay una ciudad —es una población insignificante— donde podré refugiarme. Deja que me quede en ella, ya que es tan pequeña, y así estaré a salvo». Entonces él le respondió: «Voy a complacerte una vez más: no destruiré la ciudad de la que hablas. Pero apúrate; refúgiate en ella, porque no podré hacer nada hasta que llegues allí». Por eso la ciudad recibió el nombre de Soar, que significa «pequeño poblado». Cuando el sol comenzó a brillar sobre la tierra, Lot entró en Soar. Entonces el Señor hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego que descendían del cielo. Así destruyó esas ciudades y toda la extensión de la región baja, junto con los habitantes de las ciudades y la vegetación del suelo. Y como la mujer de Lot miró hacia atrás, quedó convertida en una columna de sal. A la madrugada del día siguiente, Abraham regresó al lugar donde había estado en la presencia del Señor. Cuando dirigió su mirada hacia Sodoma, Gomorra y toda la extensión de la región baja, vio un humo que subía de la tierra, como el humo de un horno. Así, cuando Dios destruyó las ciudades de la región baja, se acordó de Abraham, librando a Lot de la catástrofe con que arrasó las ciudades donde él había vivido.

Palabra de Dios

SALMO SaI 25, 2-3. 9-12

R. ¡Tu amor está siempre ante mis ojos, Señor!

Examíname, Señor, y pruébame, sondea hasta lo más íntimo de mi ser; porque tu amor está siempre ante mis ojos, y yo camino en tu verdad. R.

No me incluyas entre los pecadores ni entre los hombres sanguinarios: ellos tienen las manos llenas de infamia, y su derecha está repleta de sobornos. R.

Yo, en cambio, procedo íntegramente: líbrame y concédeme tu gracia. Mis pies están firmes sobre el camino llano, y en la asamblea bendeciré al Señor. R.

ALELUYA SaI 129, 5

Aleluya. Espero en el Señor y confío en su palabra. Aleluya.

EVANGELIO Mt 8, 23-27

COMENTARIO: Los discípulos no sabían con quién estaban. Fueron descubriendo de a poco la identidad de Jesús. En este caso aprendieron que Jesús tenía también poder sobre la naturaleza. Nada quedaba fuera de su poder milagroso. Así poco apoco, los discípulos irán entendiendo a este misterioso galileo. Sus preguntas encontrarán respuesta paulatinamente hasta llegar al momento de la resurrección, que es cuando sus mentes se abrirán para siempre.

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.

Jesús subió a la barca y sus discípulos lo siguieron. De pronto se desató en el mar una tormenta tan grande, que las olas cubrían la barca. Mientras tanto, Jesús dormía. Acercándose a Él, sus discípulos lo despertaron, diciéndole: “Sálvanos, Señor, nos hundimos!” Él les respondió: “Por qué tienen miedo, hombres de poca fe?” Y levantándose, increpó al viento y al mar, y sobrevino una gran calma. Los hombres se decían entonces, llenos de admiración: “Quién es éste, que hasta el viento y el mar le obedecen?”

Palabra del Señor.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Dios de bondad, que das eficacia a tus misterios, concede que nuestro culto resulte digno de estos sagrados dones. Por Jesucristo nuestro Señor.

ANTÍFONA DE COMUNIÓN

Bendice alma mía, al Señor, que todo mi ser bendiga su santo Nombre.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Que la víctima divina que hemos ofrecido y recibido nos llene de vida, Señor, para que unidos a ti por el amor, demos frutos que permanezcan eternamente. Por Jesucristo nuestro Señor.

REFLEXIÓN BÍBLICA

 

“¿Por qué tienen miedo, hombres de poca fe?”

Mt 8, 23-27

Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant


1.     SOLO VA JESÚS CON SUS DISCÍPULOS

En aquel tiempo, Jesús subió a una barca junto con sus discípulos. San Mateo es preciso, es decir, en la barca solo va Jesús con sus discípulos, tal vez para que fueran testigos del milagro que habría de suceder, pero además previniendo una demostración de poca fe, Jesús considero era prudente que otros no se enteraran, entonces viaja solo con ellos. Cuando leemos a san Marcos, dice que también habían otras barcas alrededor. Jesús, Maestro de excelencia, para que no se enorgullecieran sus discípulos porque los llevaba solo a ellos, permitió el peligro en que se vieron, con objeto, pues, de que los impresionase más el milagro que iba a obrar. Pero Él estaba dormido. Como dándole tiempo al temor entregándose al sueño.

2.     NO PENSARON EN SU PODER ANTE UN ESPECTÁCULO TAN IMPONENTE

Aunque los apóstoles ya habían presenciado algunos milagros de Jesús, no pensaron en su poder ante un espectáculo tan imponente, esto les produce una fuerte admiración de preguntarse quién será el que tiene tantos poderes, así es como ellos dicen; ¿Quién es éste, a quien hasta los vientos y el mar obedecen?. Ya se había pensado que El fuese el Mesías y ahora, Jesús les va preparando gradualmente el proceso de su revelación divina.

Si Jesús hubiese estado despierto, no habrían temido ni rogado por la tempestad que se levantó, pero también pudo haber sucedido, que no hubiesen creído que pudiera hacer tal milagro.

3.     TODAVÍA NO CONOCÍAN SU GLORIA LOS DISCÍPULOS QUE ESTABAN CON EL

Según el evangelio, parece que Jesús los dejó caer en el peligro de la prueba, para que experimentasen en sí mismos su virtud, cuyos beneficios habían visto en los otros, así es como dormía, pues como dice en san Marcos, sobre la popa de la barca reclinada la cabeza en una tabla. Todavía no conocían su gloria los discípulos que estaban con Él, y aunque creían que despierto podía mandar a los vientos, no creían pudiera hacerlo estando dormido o descansando.

4.     SEÑOR, ¡SÁLVANOS, QUE PERECEMOS!

Muy asustados, los discípulos despertaron a Jesús diciéndole: Señor, ¡sálvanos, que perecemos!. Despertándose Jesús, primero le increpa a ellos, ¿Por qué tienen miedo, hombres de poca fe?, Lo que Jesús hace es reprender a sus discípulos por su falta de fe. Si hubieran tenido fe, hubiesen creído que aun durmiendo podía conservarlos sanos y salvos. Jesús se mostró a ellos como Dios, y como hombre, por cuanto se rindió al sueño.

Jesús luego le increpa al viento y al mar, y les da una orden terminante y sobrevino una gran calma.

Del movimiento del mar se levantan ciertos sonidos o ruidos que parecen ser como un anuncio de los peligros que amenazan. Las palabras de Jesús, sosiegan las turbulencias y calman los corazones agitados. A la sola voz del Señor, el efecto vino de inmediato, el viento se aplacó y sobrevino una gran calma.

5.     LOS TEMORES NOS INVADEN EL ALMA Y NOS HACEN PERDER EL TRATO ÍNTIMO CON DIOS

Dice el evangelio: De pronto se levantó en el mar una tempestad tan fuerte, que las olas cubrían la barca. Así nos sucede algunas veces a nosotros, se nos desata un vendaval de problemas en nuestra vida y la turbación entra en nosotros con amenaza de hundirnos, olas que ahogan nuestro ánimo y nuestro deseo de superarnos. Los temores nos invaden el alma y nos hacen perder el trato íntimo con Dios. Muchas veces son cosas simples de resolver, pero nos imposibilitan a entregarnos con tranquilidad a la oración. En otras ocasiones, recibimos alguna noticia poco agradable y perdemos la calma. Entonces vemos que en el fondo de nuestro corazón, pareciera que está dormido Jesús, y le preguntamos con desesperación, Señor sálvanos.

6.     JESÚS, NO DUERME NI NOS ABANDONA

El Señor nunca nos deja, pero nosotros preocupados de las cosas temporales y solo de valor material, nos atrevemos a dejarlo a Él, entonces, El permite una tempestad en nosotros y vivimos momentos de contradicción, temor, la angustia nos zozobra y nuestro corazón naufraga en las dificultades. Es así, como para superar todo momento difícil, no dejemos de acudir a Él, aunque pareciera que no nos está oyendo, si lo está. Porque Jesús, no duerme ni nos abandona, pero si prueba nuestra fe, nuestra constancia y fidelidad.

En cierta oportunidad, Santa Catalina de Siena, se quejó que de que el Señor la había abandonado en la hora de una prueba y el Señor le respondió, “Nunca estuve más cerca de ti que en ese momento”

El Señor les Bendiga

Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

PARA LA LECTIO DIVINA

 

SEÑOR, SÁLVANOS

Se puede percibir más de una analogía entre las lecturas propuestas por la liturgia de hoy. En ambas se habla de una situación tranquila que padece un cambio imprevisto: el fuego que baja del cielo y el desencadenamiento de los elementos naturales sobre el mar alborotado. En ambos casos se ofrece al hombre aterrorizado una salvación misericordiosa por parte de alguien que le presta socorro. Ambas situaciones pueden ser una gran metáfora de la condición humana, del viaje del hombre hacia la salvación, un viaje acechado por una gran cantidad de adversidades que hacen que, con frecuencia, el hombre sienta miedo frente a realidades que le superan, que le aplastan. ¿Y qué miedo es superior al de la muerte? Nosotros sabemos hoy que no estamos solos, y, aunque nos sintamos así, siempre podemos gritar “Señor, sálvanos!” a aquel que quiso pasar por nuestras mismas situaciones, que quiso dormir con nosotros el sueño de la muerte, para despertarnos con él en la vida sin fin. Se nos pide que no seamos «pequeños en la fe», que seamos audaces, constantes, perseverantes en la oración.

Estamos seguros, en efecto, de que a quien llame se le abrirá, a quien pida se le dará, y a quien ha sido bautizado en la muerte y resurrección del Señor Jesús no se le arrebatará la vida, sino que simplemente le será cambiada, porque “tanto si vivimos como si morimos, somos del Señor”. Él vino a compartir nuestra condición humana para darnos su paz, su alegría, su plenitud de vida. También nosotros, por tanto, aferrándonos al madero de su cruz, podemos atravesar todos los mares tempestuosos, seguros ahora de llegar incólumes con él a la tierra de los vivos.

ORACION

 

Señor Jesús, tú has llevado a cabo por nosotros, de una vez por todas, la gran travesía del mar tempestuoso de la historia apoyando suavemente tu cabeza entre los brazos del Padre en el leño de la cruz. De este modo, abriste para todos nosotros un camino grande y seguro, que nos permite atravesar incólumes el gran abismo del mal, que intenta atraparnos constantemente.

Haz que cada hombre te conozca y experimente que los sufrimientos del momento presente no son comparables a la alegría de la salvación que nos has preparado en el abrazo del Padre. Él nos ha querido desde siempre para ser uno con él y contigo en el amor.

FUENTES DE LA PAGINA

ESTA PERMITIDO EL RE-ENVIO, LA COPIA Y LA PUBLICACIÓN DE ESTA PAGINA, SOLO NO OLVIDE DE INDICAR EL AUTOR Y LAS FUENTES DE ORIGEN

 

La Página de la Misa Diaria, está preparada y es enviada por Pedro S. A. Donoso Brant ocds, desde Santiago de Chile, como un servicio de apostolado, amor por Nuestro Señor Jesucristo y por la Iglesia. Les ruego su oración, para que pueda mantenerse este servicio y subsidio, dando gracias a nuestro Dios que tanto nos ama.

Nota: Para la Liturgia de la Palabra, utilizo “Liturgia Cotidiana” de Ediciones San Pablo, para el estudio y comentario de la Palabra, utilizo los textos de la Biblia Nácar-Colunga, (SBNC) y/o Biblia de Jerusalén (SBJ),

(3) Para la Lectio Divina, Lectio Divina para cada día del año, de Giorgio Zevini y Pier Giordano Cabra (Eds.) y/o, Intimidad Divina, Fr. Gabriel de Santa M. Magdalena ocd

 

www.caminando-con-jesus.org     www.caminando-con-maria.org

caminandoconjesus@vtr.net

Contador Gratis

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

““-