Misa Diaria, Ciclo C

MISA DIARIA DE CAMINANDO CON JESUS

"La Eucaristía es fuente y culmen de toda la vida cristiana" (LG 11)

Página de Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

25 años en Internet

La edición de la Misa Diaria, Reflexión Bíblica, Lectio Divina y Santoral es las más antigua de Internet, comenzó en el año 1998

Se envía desde Santiago de Chile. Si desea comunicar algo, escriba al correo electrónico:  caminandoconjesus@vtr.net

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7-11-2023

 MD 9.178

LITURGIA DE LAS HORAS

 

ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 37,22-23

Señor, no me abandones, Dios mío, no te quedes lejos de mí; apresúrate a venir en mi ayuda, mi Señor, mi Salvador.A

ORACIÓN COLECTA

Dios omnipotente y lleno de misericordia, que concedes a tus fieles celebrar dignamente esta liturgia de alabanza; te pedimos que nos ayudes a caminar sin tropiezos hacia los bienes prometidos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.

LECTURA Rom 12, 5-16

Comentario: San Pablo exhorta a vivir en la unidad dentro de la diversidad de dones de los integrantes de esa comunidad. El Apóstol también los invita a tomar conciencia del propio don que fuera dado para el bien común y no para el provecho personal. La unidad es posible por el amor, don supremo que también proviene de Dios y fue dado a todos.

Lectura de la carta del Apóstol san Pablo a los cristianos de Roma.

Hermanos: Todos nosotros formamos un solo Cuerpo en Cristo, y en lo que respecta a cada uno, somos miembros los unos de los otros. Conforme a la gracia que Dios nos ha dado, todos tenemos dones diferentes. El que tiene el don de la profecía, que lo ejerza según la medida de la fe. El que tiene el don del ministerio, que sirva. El que tiene el don de enseñar, que enseñe. El que tiene el don de exhortación, que exhorte. El que comparte sus bienes, que dé con sencillez. El que preside la comunidad, que lo haga con solicitud. El que practica misericordia, que lo haga con alegría. Amen con sinceridad. Tengan horror al mal y pasión por el bien. Ámense cordialmente con amor fraterno, estimando a los otros como más dignos. Con solicitud incansable y fervor de espíritu, sirvan al Señor. Alégrense en la esperanza, sean pacientes en la tribulación y perseverantes en la oración. Consideren como propias las necesidades de los santos y practiquen generosamente la hospitalidad. Bendigan a los que los persiguen, bendigan y no maldigan nunca. Alégrense con los que están alegres, y lloren con los que lloran. Vivan en armonía unos con otros, no quieran sobresalir, pónganse a la altura de los más humildes.

Palabra de Dios.

SALMO Sal 130, 1-3

R. ¡Guarda mi alma en la paz junto a ti, Señor!

Mi corazón no se ha ensoberbecido, Señor, ni mis ojos se han vuelto altaneros. No he pretendido grandes cosas ni he tenido aspiraciones desmedidas. R.

Yo aplaco y modero mis deseos: como un niño tranquilo en brazos de su madre, así está mi alma dentro de mí. Espere Israel en el Señor, desde ahora y para siempre. R.

ALELUIA Mt 11, 28

Aleluia. «Vengan a mí todos los que están afligidos y agobiados, y Yo los aliviaré», dice el Señor. Aleluia.

EVANGELIO Lc 14, 1. 15-24

Comentario: Los “primeros” invitados a participar de la mesa del Reino, el pueblo judío y sus autoridades religiosas, presentan “sus” excusas; otros intereses los preocupaba. Esto nos advierte que las ocupaciones y las preocupaciones pueden hacernos olvidar este regalo de Dios, el cual desde ahora está abierto “a todos” sin importar la raza o la nación.   

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.

Un sábado, Jesús entró a comer en casa de uno de los principales fariseos. Uno de los invitados le dijo: «¡Feliz el que se siente a la mesa en el Reino de Dios!» Jesús le respondió: «Un hombre preparó un gran banquete y convidó a mucha gente. A la hora de cenar, mandó a su sirviente que dijera a los invitados: “Vengan, todo está preparado”. Pero todos, sin excepción, empezaron a excusarse. El primero le dijo: “Acabo de comprar un campo y tengo que ir a verlo. Te ruego me disculpes”. El segundo dijo: “He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlos. Te ruego me disculpes”. Y un tercero respondió: “Acabo de casarme y por esa razón no puedo ir”. A su regreso, el sirviente contó todo esto al dueño de casa, y éste, irritado, le dijo: “Recorre en seguida las plazas y las calles de la ciudad, y trae aquí a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los paralíticos”. Volvió el sirviente y dijo: “Señor, tus órdenes se han cumplido y aún sobra lugar”. El señor le respondió: “Ve a los caminos y a lo largo de los cercados, e insiste a la gente para que entre, de manera que se llene mi casa. Porque les aseguro que ninguno de los que antes fueron invitados ha de probar mi cena”».

Palabra del Señor.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Te pedimos, Señor que este sacrificio sea para ti una ofrenda pura, y para nosotros una fuente generosa de tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE COMUNIÓN Cfr Sal 15, 11

Señor, me darás a conocer el camino de la vida, saciándome de gozo en tu presencia.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Te pedimos, Padre, que crezca en nosotros la acción de tu poder para que, restaurados con estos sacramentos celestiales, tu gracia nos prepare a recibir lo que ellos nos prometen. Por Jesucristo, nuestro Señor.

  REFLEXIÓN BÍBLICA

 

“Un hombre preparó un gran banquete y convidó a mucha gente”

Lc 14,15-24

Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

1.    UN HOMBRE PREPARÓ UN GRAN BANQUETE

Jesús se dirige a los sumos sacerdotes y fariseos, con una parábola, donde dice que un hombre preparó un gran banquete en la cual el “hombre” es Dios. El banquete que está preparado es la alegría y felicidad del Reino. Cuando llegó la hora del banquete, mandó un criado suyo (un profeta) a avisarles a los invitados (los judíos) que vinieran, porque ya todo estaba listo, Pero todos, sin excepción, comenzaron a disculparse. Al decir el banquete está preparado, esta es la felicidad mesiánica.

2.    SE HICIERON INDIGNOS Y NO MERECEDORES DEL REINO DE LOS CIELOS.

Pero ellos no tuvieron en cuenta la invitación, y se fueron, uno a su campo, otro a su negocio; es así como consideraron más importantes sus asuntos económicos, el apego a lo material, sus cosas personales, sus propiedades que asistir a tan bella invitación, y entonces por preferir las comodidades estos se hicieron indignos y no merecedores del Reino de los Cielos.

3.    TRAE A MI CASA A LOS POBRES, A LOS LISIADOS, A LOS CIEGOS Y A LOS COJOS

Volvió el criado y le contó todo al amo, al enterarse el señor (Dios), se indignó y le dijo al criado: ‘Sal corriendo a las plazas y a las calles de la ciudad y trae a mi casa a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los cojos’. El criado invito a todo los que viven en las cercanías, a los caminantes, a los gentiles, a cuanta persona encontró sean estos buenos y malos, y la sala de fiesta se llenó de convidados.

4.    DIOS INVITA A TODOS LOS PECADORES A DISFRUTAR DE SU REINO

En esta parábola, nuevamente Jesús se dirige a los sumos sacerdotes y fariseos, judíos, de forma insistente, como es la llamada insistente de Dios a su pueblo que al parecer no oye, Israelitas, Judíos, que a mayor gravedad no solo parecen rechazar la invitación, además no quieren oír a Dios.

Hemos de considerar que el primer pueblo que es invitado es Israel, y esto es lógico, porque Dios primero cumple su promesa, sin embargo ante el rechazo de los judíos, Dios invita a todos los pecadores a disfrutar de su reino, pero no basta con ir, deberá entrar con las debidas disposiciones espirituales, una vida de gracia y rectitud.

5.    JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR, NOS INVITA

Jesucristo Nuestro Señor, nos invita en cada Eucaristía a su banquete, y a él debemos llegar con la gracia, a todos quien lo acepta le da su consuelo espiritual, a todo quien responde a su llamado, a todo el que va a Él y se entrega aceptando el llamado radical, incondicional, si reservas, esto es con todo el alma, dando todo de sí, Él le tiene un buen sitio en el banquete y el festín del Reino de los Cielos.

Sin embargo lo triste es que de los invitados hay muchos que están muy preocupados de muchos problemas o situaciones que acaparan su atención o consideran que es más importante y con ello renuncian a la posibilidad de participar en la Vida Eterna.

6.    DIOS HACE TODO PARA QUE VAYAN MUCHOS INVITADOS A SU FIESTA

Así es, como en esta parábola, nos quiere enseñar nuestro Señor Jesús, como Dios hace todo para que vayan muchos invitados a su fiesta y gente de toda índole, no hay distinción, pero no todos serán bien recibidos, eso depende de cómo llegue en su conducta el invitado.

Animémonos y procuremos una invitación, nos la hace Dios, es una gran honor, nos la hace Jesús para vivir en su intimidad, estamos todos invitados al gran banquete del Reino de Dios, nadie está excluido, todos tenemos necesidad de alimentarnos de Dios, tenemos hambre y sed de felicidad, hambre y sed de Dios.

7.    DICHOSO AQUEL QUE PARTICIPE EN EL BANQUETE DEL REINO DE DIOS

Jesús nos dijo: “Dichoso aquel que participe en el banquete del Reino de Dios”. Jesús nos está prometiendo los goces del Reino de Dios, es decir paz, dicha y amor. Esta invitación para participar en su banquete nos está llegando de muchas maneras, estemos atentos y no despreciemos los dones de Dios, los bienes del Reino a cambio de las cosas terrenales.

El Señor nos Bendiga

Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

PARA LA LECTIO DIVINA  (3)

 

«PARÁBOLAS DE LA INVITACIÓN DIVINA»:

La parábola que nos presenta el evangelio de hoy pertenece a una de esas que los estudiosos llaman «parábolas de la invitación divina»: tenemos aquí una clave de lectura no sólo del texto evangélico, sino de toda la liturgia de la Palabra de este día. Por un lado, sobresale claramente la figura de aquel que invita, el Padre, que, por medio de su Hijo, vuelve a expresar en cada tiempo y en cada lugar su propia voluntad salvífica universal. Al mismo tiempo, se perfila también con claridad la figura de aquel que, en nombre de Dios Padre, se hizo «Evangelio» por nosotros, en el sentido de que Jesús no se contentó con hablar en nombre de Dios, sino que es Palabra de Dios encarnada, es decir, viviente en medio de nosotros.

Junto a la figura de Dios Padre y de Jesucristo, aparece también en la parábola la figura de los invitados, esto es, de nosotros y de todos aquellos que, en distintos tiempos y lugares, han entrado en contacto con la Buena Nueva de Jesús salvador. Aquí es donde se capta el carácter dramático del relato, que, para nosotros, ya no es sólo una parábola, en el sentido literario del término, sino que se convierte en una historia viva, punzante, siempre actual. En ella, cada uno de nosotros está llamado a «jugarse» a sí mismo con la plena libertad de su decisión, pero también con la responsabilidad que implican sus opciones. Es bueno para nosotros que, de la parábola, mane claro el anuncio de lo que complace a Dios, de aquello para lo que vino Jesús al mundo, de lo que constituye el objeto de la predicación apostólica: Dios ama, prefiere y quiere como hijos suyos amadísimos a aquellos a quienes la sociedad margina y considera frecuentemente seres insignificantes e inútiles. La invitación dirigida a cada uno de nosotros consiste, por tanto, en ser pobres en el sentido evangélico del término, a saber: en tener un corazón consciente de su propio pecado, traspasado por el dolor y deseoso de encontrar al Médico celestial.

ORACION (3)

 

Libérame, Señor, de los obstáculos que intentan atarme a un pasado glorioso o cargado de injusticias y de resentimiento o a un presente mezquino o cautivador; hazme libre de seguirte por los caminos del Evangelio y de la historia para anunciar y difundir la verdadera libertad.

Señor, dame la fuerza necesaria para salir de una muchedumbre acomodadiza que, presa por completo de sus propios fines y de sus propias metas, se vuelve sorda e insensible a tus invitaciones y las rechaza presentando como excusas necesidades apremiantes; hazme sensible y dispuesto a tus llamadas, en todas las estaciones de mi vida, para anunciar y dejar aparecer tu voluntad.

Señor, ayúdame a seguir con honestidad y constancia mi misión -por pequeña o grande que sea-, contrarrestada a veces, trabajosa y en absoluto popular, porque deseo seguirte sólo a ti, que eres el único camino verdadero: fiel sin volverme nunca hacia atrás, cueste lo que cueste, para anunciar y servir tu proyecto de salvación.

FUENTES DE LA PAGINA

 

La Página de la Misa Diaria, está preparada y es enviada por Pedro S. A. Donoso Brant, desde Santiago de Chile, como un servicio de apostolado, amor por Nuestro Señor Jesucristo y por la Iglesia. Les ruego su oración, para que pueda mantenerse este servicio y subsidio, dando gracias a nuestro Dios que tanto nos ama.

Nota: Para la Liturgia de la Palabra, utilizo “Liturgia Cotidiana” de Ediciones San Pablo, para el estudio y comentario de la Palabra, utilizo los textos de la Biblia Nácar-Colunga, (SBNC) y/o Biblia de Jerusalén (SBJ),

(3) Para la Lectio Divina, Lectio Divina para cada día del año, de Giorgio Zevini y Pier Giordano Cabra (Eds.) y/o, Intimidad Divina, Fr. Gabriel de Santa M. Magdalena ocd.

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