DOMINGO DE LA SAGRADA FAMILIA
Este domingo, que cae
dentro de la octava de Navidad, está consagrado por
la liturgia de la Iglesia
al recuerdo de la familia más santa que ha pisado nuestra tierra. Es, por lo
tanto, ocasión propicia para que en el seno familiar haya un momento de
oración, en la hora y circunstancia más oportuna, que se puede hacer con el
siguiente esquema:
En estos momentos en que nos reunimos
toda la familia, vamos a dirigir nuestra oración a Cristo Hijo de Dios vivo,
que quiso ser también hijo de una familia humana, y aclamémosle diciendo:
Tú eres,
Señor, el modelo y el salvador de los hombres.
¡Oh Cristo!, por el misterio de tu sumisión
a María y a José,
- enséñanos el respeto y la
obediencia a los que nos gobiernan legítimamente.
Tú, que amaste y
fuiste amado por tus padres,
- afianza a todas las familias en el amor y la
concordia.
Tú, que estuviste
siempre atento a las cosas de tu Padre,
- haz que en todas
las familias Dios sea honorificado.
Tú, que quisiste que tus padres te
buscaran durante tres días,
- enséñanos a
buscar siempre primero el reino de Dios y su justicia.
Tú, que has dado
parte de tu gloria a María y a José,
- admite también a nuestros
difuntos en la familia de los santos.
Padre nuestro, etc.
ORACIÓN
Dios, Padre nuestro, que has propuesto a la Sagrada Familia como maravilloso
ejemplo a los ojos de tu pueblo, concédenos, te rogamos, que, imitando sus
virtudes domésticas y unidos por los lazos de¡
amor, lleguemos a gozar de los premios eternos en el hogar del cielo. Por
nuestro Señor.
MISAL
Dios, Padre nuestro,
que has propuesto a la sagrada familia
como maravilloso ejemplo
a los ojos de tu pueblo,
concédenos, te rogamos,
que imitando sus virtudes domésticas
y su unión en el amor,
lleguemos a gozar de los premios eternos
en el hogar del cielo.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén
ORACIÓN DE LA MADRE TERESA
Padre Celestial, nos has dado un modelo de vida en la Sagrada Familia
de Nazaret.
Ayúdanos, Padre amado, a hacer de
nuestra familia otro Nazaret, donde reine amor, la paz y la alegría. Que sea
profundamente contemplativa, intensamente eucarística y vibrante con alegría.
Ayúdanos a permanecer unidos por la
oración en familia en los momentos de gozo y de dolor.
Enséñanos a ver a Jesucristo en los miembros de nuestra familia
especialmente en los momentos de
angustia.
Haz que el corazón de Jesús
Eucaristía haga nuestros corazones mansos y humildes como el suyo y ayúdanos
a sobrellevar las obligaciones familiares de una manera santa.
Haz que nos amemos más y más unos a otros
cada día como Dios nos ama a cada uno de nosotros y a perdonarnos mutuamente
nuestras faltas como Tú perdonas nuestros pecados. Ayúdanos, oh Padre amado,
a recibir todo lo que nos das y a dar todo lo que quieres recibir con una
gran sonrisa.
Inmaculado Corazón de Maria, causa de
nuestra alegría, ruega por nosotros.
Santos Ángeles de la Guarda permaneced a nuestro
lado, guiadnos y protegednos. Amén
ORACIÓN A LA SAGRADA
FAMILIA
¡Oh
Santa Familia de Nazaret! ; enséñanos el recogimiento, la interioridad; danos
la disposición de escuchar las buenas inspiraciones y las palabras de los
verdaderos maestros; enséñanos la necesidad del trabajo de preparación, del
estudio, de la vida interior personal, de la oración, que sólo Dios ve en lo
secreto; enséñanos lo que es la familia, su comunión de amor, su belleza
simple y austera, su carácter sagrado e inviolable.
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